#ElPerúQueQueremos

Padre

Publicado: 2009-08-31

Le  molestaba que los hombres fueran los únicos autorizados a cargar el ataúd de su padre. Talón - punta, talón - punta. Se bamboleaban por las calles de su barrio de toda la vida. Los vecinos, asomados a sus ventanas, contemplaban el desfile hacia la muerte. Su madre avanzaba apoyada en dos amigas; tres velos negros. Un coro de mujeres cantaba. El humo del sahumerio flotaba por encima de las cabezas, haciendo más gris el gris de la tarde. Su padre al fin lo había conseguido: un pequeño dios rodeado de adoradores. Se abrieron las rejas del cementerio. Dos muchachos que esperaban tras las rejas se acercaron.

También  somos  sus hijos, dijeron.

Bajo el silencio de todas las miradas, pidieron cargar el féretro en su tramo final. Sin palabras, les dieron la oportunidad. Se acomodaron el ataúd en los hombros. Un instante para conocer treinta años de verdades de su padre.

 

Ahora que está muerto por fin mi padre está completo. Se ha armado en cada uno de nosotros. Todas sus distintas caras. Para eso muere un padre.


Escrito por

Katya Adaui

¿Qué es lo que quiero contar? ¿Qué es lo que he aprendido?


Publicado en

Casa de estrafalario

Escribo para descubrir, para ser feliz, para viajar, para volar. @kadaui